domingo, 27 de diciembre de 2009

A pedido del público



Bueno, no exactamente del público, es más bien a pedido de parte del público. No, tampoco, en realidad me lo pidió una sola persona que además pidió reserva de identidad. Menos público que eso no debe haber, digo yo.
El hecho es que esta persona cuyo nombre no vamos a revelar me solicitó una prórroga para participar del concurso...¿Cómo que qué concurso? El ¡HIPERMEGAFANTASTIBULOSO CONCURSO! 
No me diga que no estaba enterado. Pero qué barbaridad.
En fin, que yo le iba a contestar a esta persona que no, que bastante tiempo había tenido, que las reglas por algo estaban, que mire que pasaría si todos se ponen a pedir excepciones para todas las cosas, que así no llegamos a ningún lado y etcétera, etcétera, etcétera, etcétera, por que cuando quiero enfatizar mi posición yo utilizo cuatro etcéteras.
Pero por otro lado, la participación viene hasta el momento bastante escasa, tanto para la categoría competitiva (los que quieren ganar el premio) como para la vocacional (los que mandan sus trabajos solamente por diversión). Sí, sí, estoy un poco molesto por eso, pero no me voy a descargar ahora, descuiden.


En resumen, anuncio que los trabajos para el concurso, que originalmente se recibían hasta el 29 de diciembre de 2009, ahora se van a recibir hasta el 1ro de enero de 2010 inclusive, y el período de votación será desde el 2 de enero hasta el 15 de enero.


Bueno, persona cuyo nombre a pedido suyo me reservo, espero que ahora sí envíe su participación.
Y el resto de ustedes, no sé qué esperan. La verdad, no sé. No sé.




Buenas noches


PD: La imagen que ilustra el artículo no participa del concurso, la hice yo con un software que se llama Corel Painter X y una tableta digitalizadora.

lunes, 21 de diciembre de 2009

¡Funciona!

Hace algún tiempo un amigo me enseñó un truco para aumentar el alcance del control remoto de cierre de puertas del auto. Mucho no le creí, pero, oh, maravilla, ¡funciona! El asunto es así:


1) Tenga automóvil. Esta es tal vez la parte más importante del truco, debido a que es aplicable principalmente a automóviles.
2) Asegúrese de que su automóvil tiene un control remoto para el cierre de puertas (que utilizado convenientemente, sirve también para su apertura, claro, no es que podamos cerrar las puertas y después para abrirlas haya que llamar al cerrajero o a un ladrón amigo, seamos serios). Es ese cosito que viene con las llaves. Como una cajita cuadrada con uno o dos botoncitos. No, eso no. Eso puede ser, sí.
3)  Si está usted dentro del automóvil, bájese. Debo decirle que estoy admirado por su habilidad para leer este blog desde su auto, pero para realizar esta experiencia es muy importante que usted esté fuera del vehículo.  Hágame caso.
4) Desde una distancia prudencial de su automóvil, accione el control remoto de cierre/apertura de las puertas.
5) Si todo va bien, escuchará como las puertas se cierran. Tal vez también se enciendan las luces, o haga un ruidito, o si tiene usted una de esas alarmas que hablan, le dira "ALARMA X 34, ACTIVADA".
6) Ahora aléjese unos metros, e intente abrir las puertas.
7) Si funcionó, escuchará el ruidito, o el robot anunciando "ALARMA X 34 DESACTIVADA", o las luces, o lo que sea. Aléjese unos metros más e intente cerrarlas nuevamente.
8) Si funciona, aléjese otro par de metros.
9) Continúe alejándose y probando, hasta llegar a un punto en que el control remoto ya no responda. Pero asegúrese de que el automóvil todavía está visible. Esto es muy importante. Es casi seguro que si su vehículo está, por decir algo, en Buenos Aires, Argentina y usted se alejó hasta llegar a Frankfurt, Alemania, el control remoto no funcionará, pero el objetivo de esta experiencia es que usted pueda accionar las puertas desde una distancia razonable. Además no se cómo se daría cuenta de que las puertas no se abren desde Frankfurt. Sí, puede tener a un amigo con teléfono celular al lado del auto y llamarlo, pero no es la idea. Sea razonable, caramba.
10) Entonces, desde una distancia prudencial, desde la cual usted pueda ver su auto, pero no pueda accionar sus puertas y alarma por medio del control remoto debido a que se haya superado el alcance operativo del adminiculo, haga lo siguiente: UBIQUE EL CONTROL REMOTO CERCA DE SU CUELLO.
11) Accione el botoncito correspondiente.
12) ¡VOILÁ!, ¡FUNCIONA!

La explicación es que el cuerpo hace de antena o algo así. Probablemente el hecho de atravesar sus órganos internos con ondas de radio cada vez que quiera abrir o cerrar las puertas de su automóvil termine produciendo horribles mutaciones en su ADN, que le causarán a la larga enfermedades aún desconocidas por la ciencia, y tal vez su descendencia tenga un dedo supernumerario, no pueda distinguir el color magenta o se afilie al Partido Demócrata Progresista, pero vamos,  el truquito bien lo vale.
Así que ya sabe, cuando impresione a su cita del próximo sábado, a su jefe o a su sobrino, cuando gane apuestas en base al desafío "A que yo puedo abrir las puertas desde mayor distancia que usted", cuando sea conocido en el barrio como "El gran Puertini", recuerde que esto lo aprendió aquí, en Los Sin-logismos de Bugman.

Buenas noches.



PD: ¿Ya envió su dibujo para participar en el HIPERMEGAFANTASTIBULOSO CONCURSO? ¿No? ¿Y qué espera? Mire que termina el 29. Sí, sí, hay mucho tiempo, pero vio cómo es esto, en esta época del año los días pasan volando y al final se nos viene todo encima. No, le digo, nada más. Usted es grande y sabe lo que hace. No, qué va a saber.




martes, 15 de diciembre de 2009

F.P.P. (Frecuentemente Preguntadas Preguntas) del ¡HIPERMEGAFANTASTIBULOSO CONCURSO!

Parece que no he sido claro. La historia de mi vida. También puede ser que los lectores tengan algunos problemitas con la comprensión de textos.  No, no puede ser. Debe ser culpa mía. Como sea, a ver si con esto se despejan las dudas de lo no tan amables lectores:

1)¿Este concurso es de verdad? 
Sí, es de verdad. Voy a regalar un aparato por valor de 299 euros.

2) Si no vivo en España, ¿puedo participar?
Sí, claro que puede, pero si quiere el premio se va a tener que hacer cargo de los gastos que su envío e importación desde España requieran. Porque el premio está en España. Los gastos pueden variar según el país. Averigüe. A lo mejor no le conviene.

3)Ah, pero qué vivo, ¿qué clase de premio es este que lo tengo que pagar?
No, no tiene que pagar el premio, solamente los gastos de envío e importación.

4) Pero algo tengo que pagar, o sea que no es gratis, así cualquiera da premios.
Bueno, organice usted su propio concurso y ortorgue un premio de 299 euros. A ver, adelante ¿donde está su concurso? Lo suponía.

5) Pero con esa plata que me costaría traer el premio, yo me lo podría comprar en una tienda de electrónica.
No le creo. Mire, justamente los países que tienen ridículas barreras arancelarias no se caracterizan por tener electrónica barata en sus tiendas. Porque, no se si usted lo sabe, el dueño de la tienda también tiene que pagar aranceles de importación. Y otros impuestos. De manera que si el aparato cuesta 299 euros en origen, difícilmente cueste menos en la tienda. Eso sin mencionar que esta clase de dispositivos aún no están en los comercios de todo el mundo.

6) Igual usted es un atorrante, Bugman, organiza un concurso y resulta que el premio hay que pagarlo.
Que no, que yo no le cobro nada. ¿Cómo se lo tengo que decir?

7) No sé, si usted me dice que me da un regalo, pero para obtenerlo tengo que poner dinero, no es un regalo.
Bien. Perfecto, ¿sabe qué? No participe. Sí, puede hacer eso. No le costará ni un centavo. ¿Vio que cosa maravillosa es la libertad?

8) Yo sí quiero participar, pero no pienso pagar nada. ¿Le puedo pedir a un amigo que vive en España que me traiga el juguetito?
Claro que sí, hombre, si tiene a alguien que se lo pueda traer, disfrútelo. Pero primero participe en el concurso y gánelo, claro.

9) Mi amigo que vive en España dice que nunca en su vida piensa venir a mi país, pero yo igual le tengo cariño y le quiero regalar a él el aparatito, ¿puedo?
Por supuesto, si participa en el concurso, y lo gana, sólo tiene que darme el nombre, la dirección y el teléfono de su amigo, y se le enviará el premio a su casa. Puede ser que tenga que pagar algo por el envió. No sé, 20 euros, algo así.

10) ¡Ah, pero entonces síempre hay que pagar algo! ¡Esto es una estafa!
Demonios, ¡20 euros por un premio que vale 299! ¿Qué clase de estafa sería esa? ¡Sería expulsado de la Asociación de Estafadores si propusiera semejante estupidez!

11) Yo vivo en España, y quiero participar, y no me importa gastar 20 euros, ¿puedo?
Indudablemente, usted está en condiciones envidiables para recibir el premio. Si es que gana el concurso, claro.

12) Pero lo que no le dije es que no soy lector de su blog, caí aquí de casualidad.
Bueno, tengo la esperanza de que se convierta en un lector. Por lo pronto, vaya y anótese como seguidor.

13) Pero no me gusta su blog, yo solamente quiero el premio. ¿Puedo participar, ganar el concurso y después decirle a todo el mundo que usted es un calvo gilipollas y que lo engañé?
Bueno, eso no sería muy amable de su parte, pero no  tengo manera de impedírselo.

14) ¿Y puedo participar, ganar el concurso y después decirle a todo el mundo que su blog es una porquería, que usted es un calvo gilipollas y que nadie debería leerlo?
Para decir todo eso ni siquiera necesita participar en el concurso. Si le divierte, adelante.

15)¿Y puedo participar, ganar el concurso y después decirle a todo el mundo que su blog es una porquería, que usted es un calvo gilipollas y que nadie debería leerlo, y después hackearle el blog  y publicar fotos de pornografía infantil y denunciarlo a las autoridades y hacer que usted se pudra en la cárcel y su familia vaya a la ruina?
Oiga, ¿yo qué le hice a usted?

16) Nada, es que así me divierto yo.
Bueno, está bien. Pero después no me venga a pedir intercambio de enlaces.

17) Yo quiero participar, me divierte pero no me importa el premio, no me conviene traerlo a mi país ni tengo amigos en España, ¿puedo jugar igual? 
Sí, adelante, me encanta ese espíritu lúdico. Mándeme su dibujo y aclare que no va a querer el premio, para no restarle oportunidades a quienes sí lo quieren.

18) ¡Ahhhh, lo engañé, Bugman! ¡Soy el  de la pregunta 11 ¡JAJAJA! ¡USTED ES UN GILIPOLLAS!
En fin. Si usted lo dice.

19) ¿Por qué hace estas cosas, Bugman? ¿No se podía conseguir a alguien que le trajera el aparatito y quedárselo usted, o venderlo?
Sí, probablemente hubiera podido hacer algo así. Pero es que soy un gilipollas, y me pareció divertido organizar un concurso.

20) ¿Y si nadie le manda un dibujito, Bugman?
Bueno, en ese caso le daré el premio a quien yo decida.

21) ¿Y por qué no hizo eso desde el principio?
Ver respuesta  a la pregunta 19.

22) ¿Por qué en las bases del concurso dice que el ganador no podrá rechazar el premio? Yo rechazo lo que se me da la gana. 
La idea es que quien participe lo haga con la voluntad de ganar y acepte los gastos que eso pudiera ocasionarle. Que no haya participantes de mentira que le quiten posibilidades a los que honestamente quieran ganar el premio. Otra vez, como le dije al graciosillo de la pregunta 17, si quiere puede hacer una participación honorífica, aclarando que no desea optar por el premio, y de todas maneras publicaré sus dibujos.

23) ¡AHHHJAJAJAAAA! ¡GILIPOLLAS! ¡EL DE LA PREGUNTA ANTERIOR ERA YO OTRA VEZ! ¡GILIPOLLAS! ¡BADULAQUE! ¡MEQUETREFE!
En fin, qué tal, cómo le va. Ya lo estaba extrañando.

24) ¿Puedo mandar un dibujo que no haya hecho yo? Soy amigo de un dibujante profesional, y me debe un favor.
Vea, no tengo manera de saber si usted es el autor del dibujo o no. Ese es un asunto que deberá tratar con su conciencia.

25) ¿Puedo mandar más de un dibujo?
Sí, puede.

26) Ay, me encantaría participar, pero yo no sé dibujar, ¿qué hago?
Vea, éste no es un concurso de arte, ni hay un jurado de notables. El ganador va a ser decidido por votación, así que a lo mejor usted hace un garabato que al público le resulta simpatiquísimo y gana. Anímese, la idea es divertirse.

27) Bugman, vivo en España, estoy muy interesado en su concurso, me parece una idea magnífica, es una pena que los lectores de otros países estén en desventaja, pero haré mi mejor esfuerzo para ganar y desde ya le agradezco que haya pensado en nosotros.
Bueno, es usted muy amable, la verdad es que valoro mucho su opinión en medio de tantas críticas.

28) ¡JAJAJAJAAAA! ¡CALVO GILIPOLLAS! ¡LO ENGAÑÉ OTRA VEZ, EL DE LA PREGUNTA ANTERIOR ERA YO! ¡CAPULLO!
Ay, ay, ay.


lunes, 14 de diciembre de 2009

¡HIPERMEGAFANTASTIBULOSO CONCURSO!

Porque sí, porque los estimados lectores lo merecen, porque soy una maravillosa persona y etcétera etcétera, he decidido lanzar otro ¡HIPERMEGAFANTASTIBULOSO CONCURSO!
"¿Uh, otro más?" dirá el lector acostumbrado a mis entusiasmos injustificados, y yo lo entenderé, pero este concurso es diferente, porque tiene un premio ES-PEC-TA-CU-LAR, una "cosa" de verdad, con botoncitos y pantallita y que se puede usar, nada de reconocimiento, y felicitaciones y todo eso que es gratis.

"¿Cómo?" dirá el lector, ahora un poco más interesado.
"Así como le digo", contestaré yo. El premio es un aparato, un chiche electrónico que cuesta 299 euros.
"¿En serio?" replicará el lector incrédulo.
"Claro que sí, hombre", le diré yo, un poco ofendido por su falta de confianza.

No se si ustedes sabrán pero como resultado de la última edición del concurso de Bitácoras.com , los organizadores me dieron un regalito. Como vivo en Argentina, traerlo me cuesta casi lo mismo que comprarlo, por esas cuestiones de Aduanas y gastos de envío. Entonces, ¿qué mejor que regalárselos a ustedes, estimados lectores?

"Ah, caraaaaamba, ¿qué tengo que hacer, qué tengo que hacer, quéquéqué?" se entusiasmará ahora el lector.

Bien, vamos a describir la bases del concurso.

1) Podrá participar cualquier lector de este blog, siempre y cuando sea, además, seguidor. (Sí, se pueden anotar como seguidores ahora, no voy a andar controlando eso, en fin, ustedes sabrán lo que hacen).
2) Quien decida concursar deberá aceptar hacerse cargo de los gastos de envío y si correspondiera, de los derechos de importación del premio (es que el juguete está en España, sepan disculpar). Es por esto que sugiero que no participen lectores de países donde los gastos de Aduana y envío resulten elevados. (Por ejemplo, en Argentina deberían pagar el 50% del precio del aparato más el envío como derechos de importación, es decir unos 200 euros a ojo de buen cubero). En cambio, los lectores españoles solamente deberían pagar unos 20 euros en concepto de envío.
3) Los participantes deberán enviar por e-mail a la dirección que figura en mi perfil, UN DIBUJO DE BUGMAN, en la situación en que prefieran retratarme. No se aceptará la fotografía del perfil retocada con un software de procesamiento de imágenes para que parezca un dibujo. Puede ser a lápiz, tinta, color, blanco y negro, tableta gráfica, acuarela, témpera, oleo, la técnica que prefieran, pero debe ser un dibujo original. La imagen del dibujo deberá ser escaneada o fotografiada.
4) Los dibujos participantes se expondrán en este blog, numerados y sin mencionar a los autores y los lectores votarán por su preferido, enviando su voto a la dirección que figura en mi perfil. El asunto del mensaje deberá ser : "Concurso dibujo Bugman",  y en el cuerpo deberán declarar su voto. Por ejemplo, "Voto por el dibujo número 4". No, no tiene que votar todos por el número 4, es un ejemplo.
5) Resultará ganador el que acumule mayor cantidad de votos. El organizador (es decir yo mismo) estará inhibido de votar, salvo que se produzca un empate.
6) No se aceptarán votos anónimos, y cualquier participante que revele cuál es su dibujo será automáticamente descalificado.
7) El ganador no podrá rechazar el premio.
8) Etapas del concurso
a) Recepción de dibujos: Desde este preciso instante hasta el día 29 de diciembre de 2009
b) Exposición de las obras y período de votación: Desde el 1 de enero de 2010 hasta el 15 de enero de 2010.
c) Anuncio del ganador: 16 de enero de 2010.


El ganador deberá darme su nombre, apellido, dirección y número telefónico, que serán enviados a la gente de Bitácoras.com para que se pongan en contacto y coordinen el envío del premio.


¿Cómo que cuál es el premio? ¿No hicieron click allá arriba en el link? ¿Todo servido, les tengo que dar? En fin, el premio es un lector de e-books Inves Book 600, con un valor de 299 euros, no se si les dije.
Miren, éste es el chiche:


¿Qué otro weblog les podría dar un premio así? ¿Eh? ¿Eh? No señores, esto se ve solamente en Los Sin-logismos de Bugman.


¡Señores, a dibujar! 




Buenas noches.


miércoles, 9 de diciembre de 2009

V.I.P. (Very Important Pelado)

Por ser cliente del mismo banco desde hace muchos años, hace poco me enviaron una tarjeta que me identifica como miembro de algo llamado Banca Personal.  El envío venía en un sobre muy grueso lleno de folletos de esos que se nota que son caros, que procedí a tirar a la basura sin leer. Se supone que contenían buenas noticias, pero yo desconfío de las buenas noticias que provienen de los bancos. Casi siempre son una forma de comunicarle a uno que descubrieron una nueva manera de cobrarle cosas. 



La tarjeta no es nada especial, es un reemplazo de mi anterior tarjeta de débito con otro diseño, sirve para lo mismo y los cajeros automáticos la tratan de igual manera. No sé, yo esperaba que me saludaran más efusivamente que antes, que me hicieran algún guiño cómplice, algo. A los efectos prácticos, ser miembro de la Banca Personal parecería que no sirve de nada.

Pero resulta que la semana pasada tuve que ir al banco en persona a hacer un trámite en una caja atendida por un cajero humano.

El banco tiene un sistema para entregar turnos que consiste en un aparato con varios botones entre los cuales uno debe escoger según la naturaleza de su diligencia. Así, hay un botón que dice "Cajas", otro que dice "Plazos fijos", otro que tiene la leyenda "Inversiones". Presionando el botón correspondiente, el dispositivo entrega un número impreso que contiene una serie, "A", "B", y así hasta no sé que letra. Había un botón que decía "Banca Personal", y elegí ese. Para algo estaba. Digamos que de la ranura correspondiente salió el número "4C".

Munido Provisto del papelito codificado, me dirigí a la sala donde, en una pantalla, iban a apareciendo los turnos.
Había unas cincuenta personas esperando que exhibían diversos grados de impaciencia e incomodidad.
Entre ellos, un señor se postulaba al premio del cliente más indignado de la comarca. Vociferaba sus amargas quejas con la esperanza, supongo yo, de organizar una pequeña revuelta y obligar a la Gerencia del banco a contratar más cajeros en forma perentoria. Las palabras "barbaridad", "indignante", "falta de respeto", "perder el tiempo" y otras de calibre un tanto más grueso surgían a borbotones de su inflamada garganta. En un momento se dirigió directamente a mi persona y me dio su interpretación de la frase que figura en la puerta del Infierno, según El Dante (Lasciate ogni speranza, voi ch'entrate), dando a entender que mi espera sería eterna como la suya. (No, claro que no lo dijo en italiano, y tampoco mencionó al Dante, pero permítaseme esta ocasión para hacerme el culto). Yo simplemente me encogí de hombros.

Cuál no sería la sorpresa del combativo cliente (y la mía propia) cuando apenas un minuto después la pantalla mostró el número mágico : 4C.

Por supuesto, se quejó. Rápidamente se desplazó hacia la caja donde un aburrido empleado se disponía a atenderme y le espetó que él había llegado hacía casi una hora, y en cambio yo era uno de las más recientes incorporaciones al ejército de maltratados.
El empleado le contestó que el sistema que llamaba por turnos estaba programado de manera que los clientes de Banca Personal tenían prioridad sobre los otros.

Me miró. Lo miré. Nos miramos. Nuevamente me encogí de hombros. El señor me dirigió una mirada asesina y pidió hablar con el Gerente. Yo terminé mi tramite y me fui silbando una tonadilla galesa.

Y comprendí, una vez más, que los privilegios son insoportables. Los privilegios de los otros, claro.

Buenas noches.

sábado, 5 de diciembre de 2009

Global Calenting

Supongo que a esta altura del partido  los amables lectores estarán enterados del petit affaire de los datos masajeados en la Universidad de East Anglia, que eran el principal sustento de la teoría sobre el calentamiento global producido por el hombre. No, no, hablo del hombre en general, no de su vecino. Bueno, a lo mejor su vecino también.
Ah, ¿no saben a qué demonios me refiero? Caramba, ¿cómo hacen para vivir tan desinformados? En fin, aquí pueden leer algo sobre el tema
Sí, ya sé, siguieron de largo y no fueron a leer nada. Así estamos. 


De todas maneras no es importante, todos se equivocan. 
Expondré ahora mi teoría (y como de costumbre, la llamo así por una cuestión de humildad intelectual, porque en realidad es una certeza grande como una casa).
Primero, para establecer una base empírica, hágase el siguiente experimento:


1) Ubíquese un aparato de aire acondicionado, preferentemente de los que no tienen el compresor separado (los llamados split).
2) Asegúrese de que funciona.
3) Encienda el aparato.
4) Posicione su mano (cualquier de ellas) de manera que intersecte el flujo de aire que sale por las rejillas del equipo, del lado del frente.
5) Anote en un papel la sensación que esto le produce, limitándose al aspecto térmico. A los efectos de este experimento, poco importa si el aire acondicionado lo pone triste, le trae recuerdos de cuando trabajaba en un banco o le genera el irrefrenable impulso de cantar la milonga "Durazno a Cuarenta el Ciento".
6) Identifique la parte trasera del aparato de aire acondicionado, la que normalmente está expuesta a la intemperie. Tal vez esta operación sea un tanto arriesgada si es que el dispositivo está instalado en el piso vigésimo tercero de un edificio. No le recomiendo caminar por una cornisa, pero tal vez pueda asomarse un poquito a la ventana y estirar el brazo.
7) Si pudo realizar la tarea detallada en el punto anterior, sitúe su mano de la misma forma referida en el punto 4, pero ahora con respecto a la rejilla posterior.
8) De manera análoga a la relatada en el punto 5, anote sus sensaciones en un papel. (Sí, puede ser el mismo que utilizó antes, pero del otro lado). Continúan siendo válidas las limitaciones anteriormente planteadas, es irrelevante si el flujo de aire hacia el exterior le produce una alegría insobornable o una imperiosa necesidad de cocinar empanada gallega, concéntrese en la percepción térmica.


Si ha seguido las instrucciones al pie de la letra, usted tendrá ahora dos anotaciones en sendos papeles (o un papel escrito en ambas caras, sí, también puede ser), y en la anotación correspondiente al punto 5 dirá "frío", mientras que en la restante dirá "calor". Las variantes idiomáticas (fresco/calentito, frescolari/calenturi, ofri/lorca) de estos dos conceptos no invalidan el resultado de modo alguno.


Llegado a este punto usted habrá deducido algo muy importante: el aire acondicionado escupe aire fresquito para adentro, y calentito para afuera. 


Ahora bien, imagine un  aire acondicionado muy grande. No, más grande. Enorme, masivo, colosal, capaz de enfriar el aire de todo un país.
Piense ahora cuánto aire caliente produciría ese acondicionador monumental. La respuesta es muchísimo.  


Preparé este gráfico para que aquellos lectores que no estén familiarizados con el lenguaje científico puedan seguir mi razonamiento:







Bien, me dirá usted, si existiera algo como un aire acondicionado gigantesco, probablemente lanzaría mucho aire calentito a al atmósfera, y eso haría que todos tuviéramos un poquito de calor, todos menos los que estuvieran justo en frente del aire acondicionado gigantesco. Pero Bugman, ¿qué país en el mundo sería capaz de hacer semejante cosa y por qué?


Vamos, piense un poco, estimado lector. Haga un esfuerzo más, mire hasta donde llegó casi solito. 
-Debería ser un país cuyos habitantes prefirieran el frío. Mucho frío todo el tiempo.
-Deberían tener un nivel tecnológico tal que les permitiera construir el aparato.
-Deberían ser capaces de ocultarlo de la vista de aviones y satélites.
-Deberían tener un nivel de vida tal que se pudieran dar el lujo de tener el aire acondicionado encendido todo el año sin preocuparse por la factura de electricidad.


¿Todavía no adivinó? ¿De veras? ¿Entonces se lo tengo que decir, así, groseramente?
Qué barbaridad.


El calentamiento global es producido por un enorme aparato de aire acondicionado capaz de mantener la temperatura de todo un país a unos 2 grados bajo cero durante todo el año. 
Y ese país, es, por supuesto, Noruega.




Buenas noches.

martes, 1 de diciembre de 2009

Un poco ocupado



En cuanto encuentre un minuto libre, vuelvo.
(¿Alguien tiene un minuto libre para prestarme?)

lunes, 23 de noviembre de 2009

Menos cintura que un alfajor

Tiger Woods no está muy preocupado, el Pato Cabrera tampoco.
(Golfistas de bajo handicap, por favor abstenerse de hacer leña del árbol caído, la teoría la domino perfectamente).






Buenas noches para los que leen este blog desde Australia o Nueva Zelanda.

ACTUALIZACIÓN (24/11/2009): Señores, no es que le haya errado a la pelotita en dos ocasiones. Los golfistas antes de ejecutar el golpe suelen ensayar el movimiento sin pegarle a la bola, es lo que se denomina "swing de práctica". Está bien que yo no sea Tiger, pero no exageremos.
ECF87JRR3DF2

lunes, 16 de noviembre de 2009

Premios Bitácoras.com 2009 : el análisis.



Hagamos algunos números. A mí por ejemplo me gusta el 7, lo hago a la europea, con la rayita cruzándolo. Pero no, me refiero a números relacionados con el dichoso concurso.
Participaron unos 8500 blogs, un poco menos si excluimos a los podcast y los microbloggers (Twitter y similares) porque nosotros somos bloggers clásicos y estamos aquí desde la época en que los blogs se llamaban weblogs, ¿sabe?
Hubo 55 finalistas entre todas las categorías (también tendríamos que sacar de la cuenta a las dos mencionadas anteriormente, pero no importa, estamos haciendo aproximaciones, no calculando la trayectoria de un misil).
Lo cual quiere decir que llegar a la final nos puso en un grupo muy exclusivo que representa menos del uno por ciento de los participantes. No es poco.
Existe además la circunstancia de que el concurso está organizado por una comunidad de blogs españoles, los auspiciantes son españoles, y es parte de un evento que se llama EBE (Evento Blog España). Es natural, entonces, que el jurado, y la gran mayoría de los participantes y votantes sean también españoles. Esto, que por otra parte no tiene nada de malo, hace que la competencia sea un poco más difícil para los extra comunitarios.
En efecto, si se revisa la lista de finalistas de este año se puede ver que  Relato del Presente y Los Sin-logismos de Bugman son los únicos blogs argentinos (los únicos no españoles, en realidad) que reunieron la cantidad de votos necesarios para estar ahí. Algo similar ocurrió el año pasado (en que LSB también estuvo entre los finalistas).
¿Quiere decir, Bugman, que hay preferencia por los blogs españoles y que los argentinos y el resto de los latinoamericanos están condenados a perder siempre?
Por supuesto que no, (de hecho en la categoría Mejor Blog Personal, el año pasado ganó Hay Mujeres, un blog argentino) lo que señalo son simples hechos sin ninguna malicia. De verdad. En todo caso la interpretación torcida corre por cuenta de ustedes. Que los conozco, los conozco. Es de esperar que la mayoría de los blogs finalistas sean del mismo origen que el concurso, porque seamos sinceros, muchos de ustedes se enteraron de que los Premios Bitácoras.com existían sólo porque los incordíé de todas las formas que se me ocurrieron para solicitarles sus votos.
Si se organizara un premio equivalente en estas latitudes, sería de lo más previsible que la mayoría de los finalistas y premiados fueran argentinos, ya que el concurso sería más conocido en Argentina que en otros países.
En resumen, tanto Relato Los Sin-logismos han llegado muy alto en un concurso de prestigio gracias a los votos de sus lectores, los organizadores nos han dado un premio especial por habernos mantenido en lo alto de las votaciones durante todo el certamen, (un premio muy bonito, aunque todavía no se cómo hacer para reunirme con él) y por mi parte no tengo más que palabras de agradecimiento hacia ustedes y hacia la gente de Bitácoras.com , aunque me haga el ofendido y aproveche para hacer chistes (cosa que tengo prohibida, porque este ya no es un blog de humor) .

De todas maneras, si hoy tuviera que decidir si quiero seguir participando en este concurso, diría que no. Pero falta todo un año, no hay por qué tomar decisiones todavía.


Buenas noches.


Premios Bitácoras.com 2009



Perdimos, pero igual nos dieron un premio. Ampliaremos.

miércoles, 11 de noviembre de 2009

El bautismo

-El sábado a la mañana tenemos un bautismo, me dijo. 
-Ajá, -contesté yo-. ¿Y en dónde es?
-En la casa del padrino.
-Ajá. ¿Y se puede saber quién es el padrino?
Ella pronunció el nombre de un político muy conocido. Que había llegado muy lejos en su carrera. De hecho, había llegado todo lo lejos que se podía llegar. 


Realmente no quería ir. Pero sopesando las consecuencias de mi potencial negativa, me resigné y acepté.
Luego de haber comprobado no sin cierta sorpresa que el traje que me había comprado hacía apenas un año había sufrido una inexplicable transformación consistente en alejar los botones del saco de sus correspondientes ojales, y abreviar las perneras del pantalón dejando a la vista y paciencia de todo el mundo mis tobillos,  tuve que adquirir un atuendo nuevo esa misma tarde, y convencer al sastre de que necesitaba que le hiciera los pequeños arreglos de rigor en dos horas. Fue allí que aprendí que mencionar que uno debe a acudir a un acontecimiento social en la Residencia Presidencial ayuda a mejorar instantáneamente la productividad de los sastres. Lo curioso es que no me exigieran prueba alguna de mis dichos. Al parecer, la gente puede mentirle a sus cónyuges o al fisco, pero si dice que tiene que ir a un bautismo en la casa del Presidente, indudablemente estará diciendo la verdad.

Al menos yo no mentía, razón por la cual el sábado aquél estuve allí con mi acompañante (en rigor de verdad ella estuvo allí con su acompañante, que venía a ser yo) a la hora que decía la invitación con el sello oficial.   Por aquellos años la Residencia estaba custodiada por el Ejército, y el soldado de la puerta nos dejó pasar sin demasiadas preguntas. Se ve que no tengo el fisique du rol de magnicida.

Hay una capilla dentro de la casa del Presidente, y allí se hizo la ceremonia religiosa. Me quedé muy atrás y no vi nada, y cuando terminó el asunto salí entre los primeros. La madre del pequeño cristianizado era periodista y parecía que había llevado a todos su amigos, porque en el trayecto entre la capilla y el salón donde se haría la recepción me deben haber tomado unas cuatrocientas fotografías.
Una vez comenzado el cocktail, mi papel de acompañante se desdibujó, porque la mujer culpable de mi presencia en ese lugar desapareció para mezclarse entre los invitados y me dejó solo. Me convertí en lo que cualquier individuo cuya invitación es fruto del azar puede ser en una reunión en la que se siente particularmente fuera de lugar: una combinación de hombre invisible y depredador de sandwichitos. Que después de todo, al menos en parte se habían pagado con mis impuestos. (Y también los suyos, amable lector, si es que usted reside en Argentina).
El Presidente se paseaba de aquí para allá todo sonrisas, rodeado de un enjambre de obsecuentes bastante desagradable. Me mantuve al margen dentro de lo que era posible sin despertar las sospechas de los infaltables muchachos de la custodia.
Pero en un momento yo quedé ubicado cerca de un puerta por la que el Mandatario se dispuso a salir. Y cuando pasó al lado mío, me palmeó la espalda y me dijo algo como :  -Ehhhjeje.
En aquellos años yo desconocía completamente el protocolo adecuado para responderle a un Presidente que palmeándole a uno la espalda le dijera "ehhhjeje" (desconocimiento que, por otra parte, dura hasta estos días), así que hice lo que cualquier individuo decente haría cuando un desconocido le manifiesta una cordialidad injustificada, es decir lo miré y le dije : -¿Perdón?
Y el hombre que formalmente venía a ser el más poderoso del país, por un instante fugaz, se sintió más incómodo que yo. Y con un pequeño titubeo, respondió : -Eh...no, digo, que si la está pasando bien.
-Ah, sí, claro, muchas gracias-dije a mi vez mientras los gorilas de la custodia empezaban a memorizar mi rostro. El hombre siguió su camino y calculo que los dos nos sentimos un poco aliviados de que así fuera.

Un caballero rubicundo de porte muy distinguido (de notable parecido físico con Marcos Mundstock, de Les Luthiers) que había estado observando la escena a pocos pasos se me acercó riendo, y me dijo en un español con un suave acento que no llegué a identificar : -Veo que usted no es de los que se impresionan.
-Bueno. -dije yo- es que él no es realmente impresionante. Y en verdad no lo era. No en persona. Si le quitaban los atributos de su investidura y el aura inevitable del poder, podía pasar perfectamente por un tío medio pintoresco que venía del interior. Bueno, quién sabe, a  lo mejor ahí residía su atractivo.
Mientras hablaba con el caballero distinguido habían puesto música y algunas mujeres salieron a bailar, casi todas haciendo gala de un inexistente sentido del ridículo, pero entre ellas había una mulata de cuerpo escultural que se movía con una gracia que quien escribe tal vez podría lograr en unas treinta reencarnaciones.
-Eso sí que es impresionante-le dije a mi rubicundo interlocutor señalando discretamente a la morocha.
Y el caballero se rió otra vez, y me dijo : -Es cubana. Y es mi esposa.
Me quedé callado. Los últimos cinco minutos habían sido tal vez los más productivos de mi vida: había casi metido la pata con un Presidente, y ahora estaba completando la operación con un desconocido con aspecto de ser alguien importante. Y la custodia presidencial me seguía observando con cara de pocos amigos.
El segundo momento incómodo desapareció tan rápidamente como había llegado cuando el caballero se presentó, es decir, me dijo un nombre que no recuerdo, un apellido impronunciable y agregó su ocupación al final. Era el Embajador de Suecia.
Yo me presenté diciendo: -Bugman. Sinceramente no sé que estoy haciendo aquí.
Y el Señor Embajador de Suecia se rió fuerte, sinceramente, con alegría.
Y en ese momento fue el único amigo que tuve.

El resto de la reunión transcurrió sin sobresaltos, el Embajador y yo nos presentamos mutuamente nuestras parejas, charlamos y nos despedimos con la promesa de una cena en la Embajada. (Desgraciadamente, pocos días después nuestro amigo sueco fue trasladado a no se donde y nunca lo volví a ver).

Quedaron como recuerdo de ese bautismo algunas fotografías que salieron publicadas en una revista que ya no existe, yo estaba en algunas con un epígrafe que contenía mi nombre mal escrito. También me enviaron una que no fue publicada. En ella pueden verse a mi pareja de entonces, al Presidente y a mí. Él y yo teníamos pelo. Cómo pasa el tiempo.

Buenas noches.

lunes, 9 de noviembre de 2009

Vamos al cine




Cuando uno es un bebé, come papilla. Cuando aprende a leer, lee oraciones simples e historias elementales. Los argumentos de las películas infantiles son fáciles de entender y carecen de profundidad. La música destinada a los niños suele estar compuesta de melodías básicas. El disfrute de placeres más complejos se adquiere con el tiempo. O tal vez no. Pongamos por caso al cine. Y a mí mismo, como sujeto. Recuerden que éste es un blog personal.

Hace algunos años podía ir al cine a ver una película de Fassbinder, o de Greenaway o de algún director francés, o iraní, o noruego.
Aguantaba a pie firme (pero sentado) un plano secuencia de doce minutos de un tipo revolviendo un café o mirando por la ventana mientras llovía. Apreciaba el simbolismo de un gusanito comiéndose una hoja de parra relacionándolo con la decadencia, la maldad que corroe a la humanidad o la necesidad de controlar las plagas mediante métodos naturales. Aceptaba que la mayoría del argumento se resolviera mediante el recurso de una pareja hablando durante la mitad de la película.
Era, por decirlo de alguna manera, un espectador maduro.
Pero por alguna razón y en algún momento indeterminado ese cinéfilo sofisticado y exigente que miraba con cierto aire de perdonavidas al cine comercial se fue replegando y desvaneciendo dejando su lugar a esta criatura primitiva y rústica que busca en la gran pantalla algo más digerible, menos pretencioso, decididamente popular y por sobre todas las cosas, entretenido.


Este espectador superficial que soy ahora, que se hubiera ganado una sonrisita socarrona del antiguo intelectualoide, busca sentarse en la oscuridad y presenciar un gran espectáculo de luz y sonido, un despliegue deslumbrante y vertiginoso y toda clase de situaciones que requieran una momentánea suspensión de la incredulidad.
Quiero ver naves espaciales del tamaño de ciudades, un bueno que con un revólver que nunca se queda sin balas se despacha  a trescientos malvados armados con lanzacohetes, robots gigantes que destruyen edificios,  dinosaurios caminado por la Quinta Avenida, extraterrestres malísimos que quieren esclavizar a la raza humana, monstruos enormes o pequeños pero en cantidades industriales. Explosiones, duelos con espadas, peleas con patadas voladoras, helicópteros artillados derribados a cascotazos. Quiero ver cosas que no existen, cosas que despierten mi adormecido sentido de la maravilla, quiero conflictos de esos que se resuelven a los tiros, a las trompadas o a puro rayo desintegrador, no en el diván de un psicoanalista. Dejo las comedias de situaciones para la TV, los argumentos complicados para los libros y las películas románticas para nunca.

En materia de cine he vuelto a ser ese niño que con las manitas pegoteadas de caramelo se quedaba boquiabierto ante la aparición de la nave imperial en la primera secuencia de La Guerra de las Galaxias.

Así que ya sabe. Mi lugar en la fila de los que quieren sacar entradas para el Festival de Cine Húngaro (con charla debate posterior) está vacante. Yo estoy haciendo cola en la boletería para ver esa de dinosaurios extraterrestres malvados que con ayuda de robots gigantes quieren sojuzgar a la raza humana. Y voy a saltar en la butaca cuando el bueno los derrote a todos armado con un palo de escoba.


Buenas noches

jueves, 5 de noviembre de 2009

La verdad de la bergamota

Los amables lectores han leído en forma recurrente mis quejas acerca de que ya no se consiguen bergamotas en las verdulerías. Hace unos días, el ínclito Enmascarado nos deleitó en el blog El Opinador Compulsivo con una jugosa  (jojo, qué ingenioso que soy) anécdota referida  al tema. Vayan, y léanla, yo espero.
♪ Tururú...tururú...lariraráirara...♪
♪Sabada...sabadadí...sundadadidaaaa...♪
¿Ya está?
Bien.

Cuando hablo de bergamotas, me refiero a la fruta que se ve en la foto, que era muy común en mi infancia y que yo suponía que debía ser una especie de híbrido entre naranja y mandarina.
Años más tarde me aficioné a beber té de la variedad Earl Grey, que, oh casualidad, está aromatizado con aceite de bergamota. Un poco raro me resultó el dato, porque no encontré en el sabor del té nada que me hiciera recordar el de la fruta, pero tampoco me quitó el sueño. (Aunque se supone que el Earl Grey es una de las variedades que contiene más cafeína).
El asunto es que yo creía que la bergamota era la bergamota, y vivía feliz. O en todo caso mi infelicidad no tenia nada que ver con eso.
Pero al parecer se trataba de esa ausencia de infelicidad que sólo puede provenir de la ignorancia..
El amigo y lector Choripanboy viene a desasnarme por medio de un correo electrónico.
Resulta que "La bergamota Citrus x bergamia, es una fruta cítrica de pequeño tamaño y de forma ligeramente similar a la de una pera. Su sabor es agrio y su aromática piel se utiliza para crear aceite.
La ingestión de mucha cantidad de este aceite puede resultar peligrosa ya que puede aparecer reacciones tales como fotosensitividad y dificultad para la absorción intestinal del potasio". (Wikipedia)

Momentito, dije yo. ¿Sabor agrio? De ninguna manera, las frutas que yo recuerdo eran dulces. ¿Pequeño tamaño? Tampoco, eran más o menos como una naranja. (Sí, la naranja es pequeña comparada con una sandía, pero no es una fruta pequeña como, digamos, una cereza).
¿De qué caranchos me están hablando?
De esto:

Que no es la fruta que yo conozco. Ni siquiera es comestible. Es una cruza de limón agrio y naranja agria, así  que no puede ser muy agradable al paladar. En la vereda de mi casa paterna crecían unos árboles de naranjas agrias (amargas, las llamábamos) que sólo servían para hacer dulce, valga la paradoja. Una gracia que hacíamos cuando algún amiguito venía a jugar era darle una de esas y ver que cara ponía cuando le hincaba el diente.
¿Entonces qué es lo que yo y muchos de mis compatriotas llamamos bergamota?
Una especie de mandarina.

Conclusiones:

1) He vivido equivocado. Y muchos de ustedes también. Y un buen número de verduleros se unen a nosotros en alegre e ignorante amontonamiento.
2) Donde dice "bergamota" en todos los artículos que he escrito (excepto éste) debe decir "mandarina campeona".
3) Todos aquellos lectores que imaginaron cientos de rimas chuscas y chanzas de doble sentido con la palabra "bergamota" deben buscar equivalentes con "mandarina campeona". Ahí los quiero ver.


Buenas noches.


martes, 3 de noviembre de 2009

Ahora, es personal

Estuve reflexionando mucho sobre la condición de blog personal que deberíamos exhibir ahora.
Veamos si Los Sin-logismos de Bugman contiene los lugares comunes del caso:

Deberemos aceptarlo. Al final este es un blog personal, nomás.

Buenas noches.

lunes, 2 de noviembre de 2009

ULTIMO MOMENTO. ¡MEDIO MILAGRO NO ESTÁ NADA MAL!

Señoras y señores, el otro día pedíamos un milagro para que este blog quedara clasificado en las instancias finales de las categorías "Mejor Blog de Humor" y "Mejor Blog Personal" en los Premios Bitácoras.com 2009, y  los organizadores acaban de hacer el anuncio.
Nos quedamos afuera en Humor, ¡PERO ENTRAMOS EN PERSONAL!
¡Además, nuestro amigo Relato del Presente es finalista en la categoría "Mejor Blog Político"!
¡Suenen timbales, cornos franceses, fagots y sacabuches!

Gracias a todos, a los que votaron, a los que iban a votar y se olvidaron, a los que quisieron votar pero se vieron abrumados por la complejidad del procedimiento, a los que consideraron seriamente la posibilidad de votar y decidieron que mejor no y a los que se están preguntando en este momento "¿eh, qué concurso?". Mi sincero agradecimiento a quienes rifando su prestigio y fastidiando a sus lectores se unieron desde su espacios a la descarada campaña que he montado en  las últimas semanas.

Ahora es cuestión del jurado. Ah...ya me los imagino, alrededor de una mesa en una habitación malamente iluminada y llena de humo.
Me los imagino el año pasado, diciendo : A ver, "Los Sin-logismos de Bugman", compite como blog de humor, ¿qué les parece?. Y...no, de humor-humor no es, más bien es un blog personal...qué lástima. Bueno, otra vez será.
Y me los imagino este año: Veamos, "Los Sin-logismos", como blog personal, ¿qué me dicen?. Mhhhh...no lo veo como "personal", yo más bien diría que es un blog de humor...una pena. Ya veremos el próximo año. ¡El que sigue!


Me pregunto, ahora que LSB es un blog personal, ¿tengo que dejar de hacerme el gracioso? ¿Tengo que empezar a contar que estoy deprimido, hacer mala poesía, publicar fotos de mis mascotas, lamentarme por la pérdida de una antigua pareja (ay, Marita), descerrajar confesiones espantosas?

A propósito de confesiones, no sin algo de vergüenza, debo decir que alguna que otra vez he visto por televisión el programa American Idol, porque me gusta esa parte donde los candidatos se someten al primer contacto con los jurados. En esas audiciones la mayoría de los aspirantes hacen gala de una impericia mayúscula, y suelen ser blanco de severas humillaciones. Muy de vez en cuando aparece Susan Boyle. En resumen, la oportunidad perfecta para que un televidente que por otra parte puede ser un eficiente trabajador y un amoroso padre de familia saque de adentro toda su crapulencia y se revele como el miserable ser humano que es.

Una de esas veces apareció un jovencito de marcados rasgos orientales, diría yo que su origen era japonés.
Desplegó una performance sumamente pareja, era tan horrible cantando como bailando. Un bocatto di cardinale para los miembros del cruel jurado, que se reían a carcajadas. Su veredicto fue un catálogo de bromas despiadadas, una colección de frases tan hirientes que uno podía imaginarse al hijo del Celeste Imperio sacando ahí nomás una katana y haciéndose el harakiri con esa tranquilidad sobrecogedora que sólo pueden dar siglos de una cultura basada en el honor.

Pero no.
El muchacho esperó a que terminaran las pullas, y con toda tranquilidad respondió:



"He dado lo mejor de mí, y no tengo nada de qué arrepentirme".

Y se fue, y el jurado, que normalmente seguía haciendo comentarios después de la partida del infortunado candidato, esta vez se quedó calladito.

Como en los próximos días este blog va a ser examinado por un jurado, me pareció oportuno recordar a este cantante imposible, torpe bailarín y concursante ejemplar.

Buenas noches a los que leen este blog desde el Japón.

viernes, 30 de octubre de 2009

Se me ocurrió a mí solito






Esto de participar en los Premios Bitácoras.com  es realmente curioso: uno pierde la dignidad rogando que lo voten para llegar a una instancia donde se le permita rifar su autoestima.





PD: Se acabó el período de votación. El lunes veremos si clasificamos o no. Gracias a todos, y perdón por las molestias.


Me parece que lo leí en algún lado



"La mejor defensa contra la invasión a la privacidad, es llevar una vida espantosamente aburrida".







jueves, 29 de octubre de 2009

Los divertidos defectos del razonamiento (II)




Continuamos con esta serie de artículos dedicada a los procesos mentales estrafalarios.
En otra oportunidad presentamos el Salto Cuántico (SC), hoy nos dedicaremos a la Extrapolación Salvaje.



Defecto dos: La Extrapolación Salvaje (ES)
Si bien guarda cierta relación con el Salto Cuántico, en el sentido en que las conclusiones a las que se arriba luego de esta pirueta del razonamiento no son completamente válidas, la ES se diferencia por efectuar un salto en la dirección correcta.
Cuando se produce un SC, se puede empezar desde A, pasar por B y llegar a "Zapato", en cambio la ES comienza por A, pasa por B y aterriza en Q, donde Q es una resultante probable, pero que no surge necesariamente de A+B. Aquí no hay enanos húngaros armados con destornilladores láser, pero faltan unos cuantos pasos intermedios.

Pasemos a los ejemplos antes de que los amables lectores comiencen a presentar todos los síntomas del coma. Bueno, para algunos ya es demasiado tarde, mis disculpas.

Caso 1:
-Fui a una ferretería y no había niples de tres octavos.
-Fui a otra, y tampoco tenían niples de tres octavos.
Conclusión: Las cañerías de tres octavos dejaron de fabricarse. Todos los fabricantes de cañerías adoptaron finalmente el Sistema Métrico Decimal.

Caso 2:
-En una verdulería no tenían bergamotas.
-En otra, tampoco.
Conclusión: No se cultivan más bergamotas.
(Bueno, esto es cierto, no hay más bergamotas. Es muy extraño, pero no se consiguen en ninguna parte.Este ejemplo no sirve, pasemos al siguiente).

Caso 3:
-Me encuentro a un pelirrojo en el ascensor de la oficina.
-Más tarde, me cruzo con otro pelirrojo en la estación de trenes.
Conclusión: Nos invade Escocia.

Caso 4:
-En un restaurante, me sirven la sopa con poca sal.
-En otro restaurante, el puré también viene con poca sal.
Conclusión: La sal está carísima.

La ES es un defecto muy extendido entre publicitarios, políticos, abogados, contadores públicos y administradores de consorcios.
Continuaremos presentando divertidos defectos del razonamiento en futuras ediciones.

Buenas noches.

miércoles, 28 de octubre de 2009

Bitácoras.com 2009 : Informe de situación

De confirmarse las tendencias, en los Premios Bitácoras.com 2009 nos quedamos afuera en una categoría (Humor) , y estamos agarrados por un pelito (jijiji) en la categoría "Personal".
¿Estamos perdidos?
Claro que no.
Todo lo que necesitamos es un milagro.




(Pero Bugman, usted, tan científicamente correcto, ¿cree en milagros?)
Por supuesto que no.
Yo dependo de ellos.

(Sigan votando, hay tiempo hasta el viernes). Gracias.

sábado, 24 de octubre de 2009

Ahora mismo estoy mintiendo

"Todos mienten", dicen los Doctores House y Lightman. Y tienen razón. Un estudio que me acabo de inventar pero seguramente debe existir (vamos, hay estudios para todo) dice que, en promedio, mentimos media docena de veces al día. O una docena. Bueno, digamos 11,34 veces, para darle un aspecto más científico a la cosa. Se trata, claro, de mentiras sin importancia, mentiras blancas, como decirle a un cliente que "lo suyo está por salir". En el fondo, todos sabemos que no es verdad, pero nos quedamos contentos.

Podríamos decir (de hecho lo diremos, ya que nadie nos lo impide) que hay tres niveles de mentira: la mentira blanca, la mentira mediana y la mentira cochina y descarada.
Estudiemos brevemente cada uno de ellos.

La mentira blanca hace las veces de lubricante social. Usted no podrá salir de un problema grande utilizándola, pero evitará un momento desagradable. Técnicamente casi ni es una mentira, ya que no se espera que nadie la crea realmente.

Ejemplos de mentiras blancas:
-Esto está riquísimo, querida.
-Mañana mismo le entrego el informe, señor jefe.
-¿No recibió el e-mail que le mandé ayer?
-Yo no lo voté.
-¿Cómo me iba a olvidar de tu cumpleaños?.
-El cadete va para allá con el cheque.
-Le queda perfecto, señor, ¿se lo envuelvo o lo lleva puesto?
-Estoy muy contento por tu ascenso.
-No tengo dinero en este momento.



La mentira cochina y descarada, en cambio, es un recurso desesperado. La estrategia subyacente en el uso de esta herramienta es descolocar al adversario, desviar el tema y salirse por la tangente. O tal vez por la puerta y a toda carrera. O saltando por la ventana. Salirse, en todo caso. Requiere de una absoluta falta de escrúpulos, cierto  histrionismo y una cuota de candidez de la otra parte.

Ejemplo1:
Usted vuelve a su casa a las doce de la noche, con manchas de lápiz labial en el cuello de la camisa. Ante el previsible interrogatorio de su mujer, responde:
"Tengo que confesarte algo: la Compañía para la que trabajo pertenece a una secta que practica ritos donde todos se visten de mujer y se dan besos en el cuello. Esto que ves aquí me lo hizo Santilli, de Contaduría".

Ejemplo2:
Nuevamente en casa a las doce de la noche, sin manchas de lápiz labial, pero borracho como un cosaco.
¡Essshtuvesss involuc...envolvido...esshhhtuve en un eshhperimendo schiinedífico!


Ejemplo3:
Usted se encuentra frente al cadáver fresco de su socio, con un cuchillo ensangrentado en una mano y un pasaporte en la otra. Llega la policía.
¡Buenas noticias, agentes! ¡Aquí está el famoso contrabandista de cuchillos ensangrentados!


Hemos dejado para lo último a las mentiras medianas, y no es casual que así sea. Porque esta clase de mentiras que se quedan a mitad de camino son las menos recomendables. Los mentirosos torpes las usan todo el tiempo, y son, a la larga, descubiertos. No es inocua como la blanca (que todos descubren pero disculpan) ni alevosamente increíble como la cochina (que por su propia inverosimilitud descoloca y da tiempo para escapar). Si la mentira blanca es casi una convención social y la cochina un recurso desesperado, la mentira mediana es un engaño malintencionado.
No nos caen simpáticos los mentirosos medianos. Son la clase de gente que engaña a la esposa y descuida a sus hijos. Y no, no daremos ejemplos. No queremos que ese comportamiento tenga la menor publicidad.

Buenas noches




lunes, 19 de octubre de 2009

Duda gramatical (actualizado)

Seguramente entre los estimados lectores habrá quien pueda despejarme esta duda (que no es tal, estoy seguro de que es como yo digo, pero a lo mejor me equivoco, sería muy raro, pero alguna vez tiene que pasar, ya estoy un poco cansado de tener siempre la razón, al principio está muy bien, pero después de décadas de no equivocarse uno empieza a aburrirse, en serio, hagan la prueba, no se equivoquen nunca y después me cuentan).

Hace algún tiempo que leo y escucho, y cada vez más seguido, una construcción gramatical del tipo:

Te/me  dije/dijo que hagas/no hagas tal cosa.


Por ejemplo, las frases:

Te dije que no traigas el perro.
Me dijo que no llame a Carlitos.
Les dijimos que vengan en ayunas.
Nos dijeron que tengamos paciencia.

Me suenan espantosamente mal. Para mí la forma correcta es:

Te dije que no trajeras al perro.
Me dijo que no llamara a Carlitos.
Les dijimos que vinieran en ayunas.
Nos dijeron que tuviéramos paciencia.

¿Es como yo digo? ¿Se aceptan las dos formas? ¿Hay excepciones? ¿Eh? ¿Ehehe? ¿¿EHEHEHEEEE??
Gracias.


Buenas noches.

-------------------------------------------------------------------------
ACTUALIZACIÓN (20/10/2009) . PREMIOS BITÁCORAS. COM 2009


Tenemos buenas y malas noticias. 
Primera buena noticia: Nuestro amigo Relato del Presente (que así se llama el blog, no nuestro amigo, ¿otra vez se los tengo que explicar?) continúa segundo en las clasificaciones parciales en la Categoría "Mejor Blog Político". (¡Biiiiieeeeeeeennnn! ¡Suenen pífanos, oficleidos y sacabuches!).


Segunda buena noticia: Los Sin-logismos de Bugman, que la semana pasada había descendido un lugar en las clasificaciones parciales de la Categoría "Mejor Blog Personal", ¡recuperó el segundo puesto, es decir, por ahora llegaría a la instancia final! (¡Bravoooooo! ¡Suenen fagots, clavicordios y panderetas!)


La mala noticia: Los Sin-logismos de Bugman, que hasta la semana pasada mantenía un auspicioso segundo lugar en la Categoría "Mejor Blog de Humor", ¡HA DESCENDIDO AL CUARTO PUESTO! ¡DE SEGUIR ASÍ LA COSA, NOS QUEDAMOS AFUERA! (¡Buuuuhhhhhhhh! Suenen cadenas, rechinar de dientes y aullidos de almas en pena!).


Contemplemos la situación con calma. Llegar a la final en una de las dos categorías no está nada mal. Claro que las posibilidades de ganar algo se duplican si llegamos en dos. Claro que nos gustaría mucho llegar en dos. Por supuesto que queremos llegar en dos.


Entonces,estimado lector, ¿por qué no me vota? ¿EH?


Vea, si usted me tiene algo de estima, probablemente le traiga alguna satisfacción que este blog llegue a la final. Entonces no hay razón alguna por la cual debiera negarme su voto.
Si en cambio, usted me detesta, tal vez quiera verme humillado, frustrado, derrotado. ¿Y qué mejor que darme su voto, llevarme a la final y disfrutar maliciosamente cuando el jurado no me elija para un premio? ¿No le provocaría un placer malvado, entonces verme morder el polvo no en una sino en DOS categorías? Porque una cosa es que no pueda jugar, y entonces mi fracaso será relativo, y compartido con cientos de colegas que no llegaron, pero otra muy diferente es verme allí arriba y bajarme de un hondazo, exponerme al escarnio público, a la burla multitudinaria, a la chirigota global. ¿Se le ocurre mejor forma de desquitarse? Adelante, vóteme y observe cómo caigo en la agonía pero desde lo alto. Mientras más alto mejor.
Por último, si usted pertenece a la amplísima mayoría de individuos a quienes mi blog, mi persona y mi trayectoria les resulta completamente indiferente, no pierde nada con votarme. No tiene que alegrarse, no tiene que entristecerse. Vaya y vote, y yo le agradeceré. Aunque a usted le importe un bledo.


¡En resumen: Sigan votando a Relato del Pesente en la categoría "Mejor Blog Polìtico" y a Los Sin-logismos de Bugman en las categorìas "Mejor Blog Personal" y "Mejor Blog de Humor"!


Gracias.

-------------------------------------------------------------------------

martes, 13 de octubre de 2009

Cositas sueltas 22




-Los Estados Unidos de Norteamérica consumen unos 20 millones de barriles de petróleo por día. Me pregunto qué harán con los barriles vacíos.
-Para que se produzca un brainstorming es preciso que antes se haya formado una buena cantidad de nubes de flatos.
-Yo soy de los que dicen "yo soy de los que dicen".
-No hay nada más poderoso que una idea a la que le ha llegado su tiempo. Por eso fracasé con mi blog en 1973.
-Si el mundo fuera tan sencillo como nos quieren hacer creer los spammers, para ser feliz sólo haría falta un reloj de imitación, un título universitario falso y una cuantas dosis de Viagra.
-Sigo con mucha atención cada noticia relacionada con la búsqueda del eslabón perdido. Dos por tres se me  cae la medallita del llavero.
-Si un gato norteamericano, de los que tienen nueve vidas, estuviera ya por su octava y tuviera que viajar a Argentina, donde los gatos tienen siete, ¿deberían matarlo en la Aduana?
-Si el fracaso enseña, ¿el triunfo embrutece?. Yo he visto varios ejemplos.
-Tengo un libro y escribí en un árbol. ¿Adónde tengo que plantar un hijo?
-Todo este asunto del cambio climático no es más que una cortina de humo para tapar la alarmante ausencia de bergamotas en las verdulerías.
-Hay en el mundo una cierta cantidad de gente que es estúpida y tiene dinero. Mi proyecto de vender agua deshidratada apunta a ese mercado.

Buenas noches (en Pekín es de noche, recién llamé y estaban durmiendo).



-------------------------------------------------------------------------------------
PREMIOS BITÁCORAS. COM 2009


¿Usted no ha votado aún al frente Relato del Presente/Los Sin-logismos de Bugman? ¿Y por qué, me puede decir? Nunca jamás un frente electoral fue tan lógico: ¡Relato, como blogger, va de frente, y Bugman, es pura frente! Vote al frente, no lo enfrente. No se ponga en la vereda de enfrente, se lo pedimos de frente.
Categorías: Relato del Presente en "Mejor Blog Político", Los Sin-logismos de Bugman en "Mejor Blog de Humor" Y "Mejor Blog Personal" (*)





(*) En esta categoría veníamos segundos y ahora estamos terceros. Todavía no nos quedamos afuera porque clasifican los tres primeros, pero faltan dos semanas. ¿No nos va a dar la posibilidad de competir? ¿En serio? ¿Tan malvado es usted?. Vamos, vote, llévenos a la final y disfrute cuando el jurado le de el premio a otro. ESO es ser malvado.

Blog Widget by LinkWithin